Peseros
¡Usted
me paga completo,
aunque
vaya sin asiento
aquí no
vale su placa!
gritó el chofer a la Flaca.
Dio su pasaje la Muerte,
al pobre chofer sin suerte,
moneda de oro entregó
con la cual lo ahogó.
Se llevó a los choferes
porque olvidan sus deberes:
tratan mal a pasajeros
en sus maltrechos peseros.
Ninguna ruta escapó
hasta el último atrapó,
todos se van al infierno
a sufrir el llanto eterno.
La Paz quedó sin peseros,
esos carros con agujeros,
los choferes van río abajo
sin dinero ni trabajo,
encerrados y con tranca
Caronte rema la barca.
La ciudad será segura
la Calaca así lo augura
con choferes más humanos
en nuevos buses urbanos.
Furiosos
ecologistas
A recoger un muerto,
rumbo al aeropuerto,
con retardo va la Muerte,
pero hoy no tiene suerte
pues bloqueada está la vía
y su protesta no servía.
Furiosos ecologistas,
como gorilas golpistas,
no daban paso a la gente
y se les ponían enfrente.
¡La mina fue aprobada!
gritaba la manada,
¡tu agua defendemos!
exclamaban unos emos.
La mina es mala, sin duda,
les explicó la Huesuda,
pero no afectes al pobre,
aquel que cobra en sobre.
La Calaca no aguantó
y el bloqueo reventó,
con guadaña en su mano
no dejó a ninguno sano.
Intolerantes
Una propuesta singular
hacía el Frente Familiar:
limitarle los derechos
a los seres “malhechos”.
Con sus anuncios lesivos
se muestran muy activos,
no quieren que homosexuales
“rompan las reglas morales”.
Paren su
campaña de odio
dijo la Flaca en el podio,
ustedes
no tiene honestidad
para
atacar la diversidad.
Ya desapareció el Frente
al averno cayó esa gente,
la Calaca fue muy obvia,
pues detesta la homofobia.
Baches
La Muerte fue a palacio,
llegó temprano y despacio,
todos corrieron asustados
no quería ser atrapados.
Venía a hacer un reclamo
por los bache a cada palmo,
fue a la oficina de Martínez
quien dormía en calcetines.
Tenemos
ya muchos baches,
dijo la que usaba huaraches,
a cada
rato me desarmo,
¡acaba
ya con tu marasmo!
Ya no
hay dinero para eso
dijo el alcalde muy tieso,
se fue
para el carnaval
¡qué
será un gran festival!
¡Malaya
sea tu suerte!,
gritó enojada la Muerte,
así que por esa osadía
lo mandó a la fosa fría.
Malecón
El malecón está deshecho
hay basura en cada trecho,
también caca de perros
así como tierra en cerros.
La Muerte iba con Cerbero
sorteando el cochinero,
sin querer se tropezó
y toda se despedazó.
Con el rostro furibundo
le reclamó a todo mundo:
¿dónde
está la autoridad
que no
tiene sensibilidad?
Va a todas las dependencias
que denotan incompetencias:
se murieron en Zofemat
igual que en la Semarnat.
¡Ya llenó los panteones
con estos talegones!